¡VIVE TU PROCESO!
Como cristianos
debemos ser conscientes que la vida en Cristo está llena de procesos y de
situaciones adversas.
Simplemente la
vida en Cristo no es “tan fácil” como se escucha a diario, es todo un reto que
solo los valientes lo toman.
Si analizamos bien
el proceso de conversión del hombre, cuando una persona quiere llegar a los
pies de Jesús, ésta por obligación debe pasar un proceso de transformación, de
entrega de lo malo que han sido sus actos y arrepentimiento, para sumarse al
reto de vivir una vida en Cristo Jesús.
La biblia relata
sobre un hombre llamado Saulo, un hombre que perseguía a los discípulos del
Señor, Pero algo que se resalta en esta historia es el proceso que
Dios le hace pasar para su conversión y para que predicara el evangelio de
Jesucristo. (Hechos 9. 1-9)
En medio del
proceso de Saulo que pasó a ser Pablo en el versículo 9 podemos ver lo que Dios
le hace pasar, nos dice que este estuvo tres días sin ver, ni comer.
De manera que
surge una pregunta para nosotros, ¿Cómo te sentirías tú estando en esa
situación? ¿Qué pasaría por tu mente?
A veces los
procesos en Dios te llevan hasta lo más profundo, donde crees que has perdido
todo, donde te sientes confundido y sin salida. Pero Dios es tan fiel que
siempre nos da una respuesta o salida a nuestra aflicción en ese momento. (Salmos119. 50)
Después que Pablo
estuvo ahí, en ese lugar, en Damasco. Vemos que Dios le manda un mensaje de
esperanza a través de una visión, la cual era que un joven llamado Ananías lo
haría recobrar la vista. (Hechos 9. 12)
Habla Dios a
Ananías para que fuera e hiciera lo que el mismo le había ya mostrado a Pablo a
través de la visión. Este hombre en obediencia va y al instante de hacer lo que
Dios le mandó, Pablo recobra la vista y es lleno del espíritu Santo, tal como
Dios lo había mostrado.
Luego de eso,
Pablo va y empieza a predicar a Damasco.
A través de esta
historia vemos que Dios nos hace pasar por situaciones difíciles solo para que
aprendamos, porque si bien vemos este era un perseguidor de él. Pero cuando
estamos en los planes de Dios nos hace entender y comprender que nos quiere
para servicio de su nombre y todo esto lo hace por medio de procesos, los
cuales no serán fáciles, pero a la final siempre Dios te mostrara lo que tenía
preparado para ti.
Si estas en un
proceso hoy, no solo de conversión, porque en Dios hay cantidades de procesos,
si no que en cualquier situación en la que te encuentres hoy, No temas Porque
Dios está contigo. (Josué 1. 9)
Volviendo al Salmo
principal de esta reflexión, el versículo 5 dice “Encomienda a Jehová
tu camino, y confía en él y el hará”
Para que Pablo
recobrara la vista, tuvo que creer y encomendarse a Dios, porque si este se
hubiese quedado con la actitud de cómo era, no hubiese pasado nada. Pero en
medio de su confusión, de su estado o agonía, creyó, confió y Dios hizo.
Así que confía en
Dios, vive tu proceso hoy, que el Señor ha prometido cosas para tu vida y tiene
propósitos contigo.
Levántate creyendo
en el Señor y viviendo tu proceso en su nombre.
Que Dios te
bendiga grandemente, no dejes de creer.
¡CREE, TEN FE, QUE LO QUE DIOS PROMETIÓ LO HA DE HACER!
-Linda Carolina Quiroz.
Comentarios
Publicar un comentario